Hoy me embriagué de huerta y de olor a mierda. Como está la universidad cerrada, decidí seguir el río y llegué a la huerta (es que el río y la huerta son inseparables). Aunque si bien era huerta, las personas que había por allí no eran precisamente huertanos. Aquí hay algunas fotos de las casas huertanas.

Y con la universidad cerrada y mejor no coger el transporte público ni darse besos con nadie, pues no hay mucha variedad. No me alegró mucho lo de que se cancelaran las clases... Bien es cierto que madrugo un poco 3 días a la semana, pero la alumnada es graciosa y respetuosa. Además, casi que lo peor de todo, este viernes no hay tenis... Algunos esperan el viernes para los cubatas, yo ahora espero por el tenis. Y claro, tampoco he podido comprarme la raqueta todavía...

Aquí van algunas señales que me han gustado hoy.