Seguimos con la cuarentena. Con diferencia, los enmascarados superan a los no enmascarados. En el centro comercial del barrio estaba todo cerrado menos el supermercado.

Estuve de paseo por la zona de los estadios. Estuve en el estadio donde juega el equipo de béisbol de la ciudad (los Buffaloes) y el antiguo estadio de la universiade de 1985. Lo que más me ha llamado la atención ha sido una especie de monumento a la entrada del estadio donde se celebró la universiade en donde se recogían los ganadores de las diferentes disciplinas. No lo sabía pero la URSS ganó el campeonato de baloncesto con lo que era el comienzo de un legendario equipo a la altura de la Yugoslavia de 1990 y el equipo estadounidense de los juegos olímpicos de 1992. Qué deportistas aquellos, que se dejaban la piel por un plato de arroz (menos los de EE.UU que eran capitalistas). Ahí está el testimonio. A mí particularmente me gustaba Šarūnas Marčiulionis (a los pobres les han desgraciado el nombre y al país le han quitado lo de socialista o lo de soviético).