Ayer me dijo mi compañera de despacho rusa la siguiente frase/dicho (venía a cuento de algo que me tiene ligeramente intranquilo): "Los peces buscan agua más profunda, el ser humano busca lo que es mejor". En ruso tiene más gracia porque las palabras 'más profundo' y 'mejor' riman... No obstante, parece una tontería, mas no lo es.
Fue un día filosófico. Tengo un curso de Historia Cultural de España con la alumnada de segundo. Llegué con un ambicioso programa que tiré a la basura cuando vi que casi que ni me entendieron cuando me presenté el primer día. En fin, ahora tenemos un programita y vemos algunas cositas. De vez en cuando, llevo a clase a un personaje español de renombre, un político, un científico, un filósofo... que no todo sea la paella, el sol y el reducido grupo de nuestros españoles más trágicamente internacionales. Tocó esta semana Santiago Ramón y Cajal. Hablamos de su vida, la medicina... Parece ser que el gran médico fue un muchacho rebelde, un artista que estudió Medicina por obligación y que descubrió su vocación por la misma en la Guerra de Cuba (ya sabéis que más se perdió en Cuba). Y aprovechando el tirón, adopté mi papel de educador y guía. Les pregunté si tenían alguna vocación, cuál era... Caras confundidas, alguno dormía con los ojos abiertos, otros con ellos cerrados. No había vocaciones, tan sólo una tímida vocación musical. Les obsequié con un pequeño, pero acalorado, discurso sobre la importancia de la vocación, la belleza del momento en que uno descubre su vocación y tiene la inmensa suerte de dedicarse a ella... "Buscad vuestra vocación, no importa cual sea, buscadla, sólo así vuestra vida tendrá sentido". Alguno se quedó pensativo, y ya con eso, creo que cumplí con mi labor.
Abajo presento dos creaciones artísticas. Es una foto complicada, con gran amplitud. Para este tipo de fotos se utilizan unos objetivos especiales por debajo de los 17mm (los llamados 'wide angle'). No obstante, también se puede conseguir un efecto similar con algunos truquillos. Mi máquina tiene una función para 'coser' las fotos, que luego materializo con el ordenador. En este caso, son dos. Me gusta especialmente la segunda, aunque al unirlas, hay una ligera imperfección que le resta grandeza a la foto (además, he tenido que quitarle el marco porque el tamaño era prohibitivo para este medio). ¿Será esta mi vocación?


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