Empiezo a relatar algo sobre mi viaje a Nagasaki y alrededores. Estuve en total 5 días 5, contando el de llegada (ya estaba allí a las 0800) y el salida (a las 2000); es lo que tiene viajar por la noche que te permite exprimir a fondo los días.

Día 1.

El primer día fue una toma de contacto general con la ciudad y reserva del barco para ir a la isla objeto de admiración. Grandísimo calor y humedad acompañaron a este primer día que unidos a la desvelada hicieron el día duro.

Había un barco portugués que despertaba la curiosidad de los japoneses, aunque ya sabemos quienes eran los dueños de los mares.

Aquí hay un monumento a 6 frailes 6 españoles que fueron crucificados, junto con otros seguidores japoneses, en tiempos de hostilidad hacia el Cristianismo. Recientemente el gobierno japonés se ha disculpado por el trato dispensado a los coreanos durante las rencillas que tuvieron y no estaría mal otra disculpa por lo que nos llevamos entre manos. La verdad es que la labor de estos misioneros es similar a la que desempeñamos los mercenarios de la lengua, necesaria, agradable pero todavía sin el reconocimiento debido.

La maquinaria industrial es mi debilidad, lo tengo que reconocer.