Ya estoy de vuelta de mi viaje por Nagasaki y alrededores (11 horicas en autobús nocturno desde mi ciudad; dirección sur, isla de Kyushu). 5 días 5, que coincidieron con el 65 aniversario del ataque atómico, aunque no era ese el objetivo de mi viaje. No era otro sino una primera toma de contacto con la isla abandonada de Gunkan (Gunkanjima). Así que, nada más llegar, reservé asiento en el recorrido turístico que, como era de esperar, fue un timo. Apenas dejan caminar por una senda vallada de unos 300 metros, con megafonía a tope y sin entrar para nada en los tesoros del lugar. Fui amonestado verbalmente en 3 ocasiones 3, por ir con el grupo verde y no el amarillo que era el mío (o algo así), y por quedarme rezagado sin seguir a la masa (para qué, si no entendía nada y el volumen del cacharro era infernal). No obstante, la visita no hizo más que acrecentar mi ansias de pasear libremente por la isla y sus edificios. Con mejor equipamiento y 10 horas en la isla podría hacer grandes cosas.

Dice un entendido de la fotografía que siempre se debe eliminar y ser selectivo al máximo. Un par de fotografías con poca sustancia pueden echar al traste lo que en un principio parecía emocionante. Digo yo que debe ser como el hablar y el peligro de quedar como un necio entre aquellos que hablan mucho.

En entregas sucesivas iré subiendo más fotografías. De momento, una selección de mis 3 momentos 3 favoritos de la isla. No exagero en absoluto al afirmar que el lugar es impresionante, y eso que no vi nada.

El resto de fotos están aquí.