Bueno, estoy recien llegado de mi reciente viaje de negocios. He estado en la isla de Kyushu para una entrevista de trabajo. A todo copete, con los gastos pagados. Volvía pensando en el tren-bala (que me tiene engolosinado) que creo que no aceptaré el trabajo si es que me lo ofrecen. No que esté mal, pero tengo que subir mis aspiraciones y no conformarme con cualquier cosa. Eso sí, la universidad, a todo copete ($$), impresionante el lugar, en las montañas, divisando el mar y la tierra firme desapareciendo en el horizonte fusionándose con el mar... Bonito bonito. El tiempo no ha acompañado para nada, viento, nieve-lluvia, se me perlaban los ojos... Pero iba bien pertrechado y sin problemas. No he parado de andar y comer bollos; hoy, 4.

He vuelto re-contento. He recorrido la magnífica ciudad de Fukuoka que pasa a convertirse en una de mis favoritas (venga, que me arrojo, mi top 3: San Diego, Fukuoka, Jerusalén). Y, un pueblo perdido con unas cosicas más que interesantes, creo que lo más bonito que he visto hasta la fecha en este país. He hecho muchas fotos que iré haciendo públicas, pero ahora no, que es tarde.

Y todo por la patilla...