Hoy he conocido a un violinista húngaro. La historia, tal que así...

Tras una complicada mañana de clases, decido aprovechar el bucólico mediodía y me siento al sol con JR a marujear. En esto que veo salir de un edificio a un tipo de apariencia algo extraña, un caucásico, y con un violín en la mano. La estampa es extraña así que alzo la mano, a modo de saludo, y suelto una fórmula de saludo en inglés. Como era de esperar se acerca. Que si toca el violín (¿o qué?), que ha estado en la clase del profesor de alemán (que es alemán), ha tocado el instrumento y se va. Me pregunta mi origen y le digo que España, a lo cual, toma el violín, se lo pone donde tiene que ponerse y me toca una pieza de Falla. La verdad es que ha sido algo refrescante la reacción a lo de 'España', acostumbrado a 'Maradona', 'Barsa', 'Real Madrid'... Le he ofrecido un breve aplauso y le he dicho que me encanta su país (lo primero es verdad a medias puesto que le hubiera aplaudido cualquier cosa, y lo segundo sí ha sido sincero). Dice que volverá, con Brahms. A lo extraño del encuentro, añado el hecho de estar tocando el violín en una clase.